Un poco de razón sí que tienen los que me escriben recordándome que no estoy comentando esta Asamblea Capitular. Descartada la censura - porque no la hay en absoluto - se podría pensar que es fruto de un respeto a la seriedad del Capítulo, ahora que nos faltan las caricaturas del P. Martin, o bien que simplemente no me seduce lo que está sucediendo. No es nada de eso.
Es verdad que otras veces tenía más tiempo para escribir (sobre todo durante las reuniones) y que esta vez tengo menos momentos de conexión.
Pero esta primera semana ha tenido momentos significativos.
Es verdad que el comienzo prometía poco La presentación de las actividades del consejo general durante los últimos años ejaba un poco vaccío de trabajo la reunión de Nigeria.Sin embargo la dinámica del Capítulo ha ido mucho más allá de la simple "evaluación del buena marcha del programa" y está pretendiendo ser un diagnóstico y un impuslso a la vida de la Orden.
Básicamente la cuestión está en "recursos eficientes". Fue una idea presentada por Anthony Banks cuando presentó la situación económica de la Orden. Su diagnóstico era que los recursos de la Orden habían disminuido en algunas provincias y aumentado en otras, de hecho su tesis es que la Orden se está "desplazando" desde Europa y Estdos Unidos hacia uuna nueva realidaden América Latina y África. Claro que para poder afirmar esto es necesario distinguir el concepto de "finanzas" y "economía"
Tony Banks nos ha ayudado a entender que las finanzas se refieren sólo al dinero, mientras qeu la economía considera todos los recursos de la Orden y nos proponía como los más importantes:
Nuestros Hermanos
Nuestra vida común
Nuestro nivel de competencia pastoral
Nuestras obras
Nuestro dinero
Nuestras aspiraciones y potencialidades
Ha sido refrrescante y ha dado un enfoquemás amplio a un capítulo que venía muy marcado por el problema económico, en una situación en el que las abundantes donaciones del norte hacia el sur comienzan a secarse y tras la lluvia de subvenciones a las circunscripciones emergentes comienza a aparecer la cruda realidad de que algunos de nuesros recursos no están aprovechados de la mejor maner posible.Así que las reuniones de grupos, que esta vez han sido más breves y ágiles, han tratado de reflexionar sobre la forma de reorganizar los recursos de foma más eficaz.
Se había presentado también una idea que me pareció rompedora pero que no ha tenido mucha acogida: entender el voto de pobreza desde la comunión de bienes. Evidentemente que esto lo habiamos aprendido todos en el noviiado.... pero lo original de la propuesta del consejo es que ampliemos la viviencia del "voto de vida común" mas allá del límite de la comunidad e incluso de las fronteras de la provincia para considerar toda la Orden.
El otro pilar de la semana fue la reflexión sobre la formación y las vocaciones, aunque curiosametne el documento sobre vocaciones no fue apenas estudiado. Se le dedicó mucho tiempo al nuevo plan de formación, que ha sido recibido de una forma un tanto fría y que daba la impresión de que aún no estaba listo para sacarlo del horno. Pero la auténtica reflexión sobre la formación se ha dado en temas puntuales que han ido surgiendo y que han levantado la pregunta de si formar en el lugar de origen o en un lugar común, mejor preparado y con medios más seguros; o la necesidad de que los profesos vivan una experiencia fuera de su propia región para ampliar horizontes; o la urgencia de resolver el problema de la preparacion de los foramdores.
Así que ha sido una semana dde grandes ideas, e incluso de ideas ambiciosas, propias de corazones jóvenes y dispuestos a cambiar el mundo. Habrá que esperar a las solucions concretas, a las ideas a poner en práctica, a los compromisos que se quieran asumir.
Me quedo esta semana con dos cosas. Con que no hay ninguna tensión personal, a pesar de que algunas propuestas pueden incomodar a unos o a otros. Y me quedo también con la capacidad ambicios de esta Asamblea, una de las más jóvenes y la más multicultural de todos los capítulos, una asamblea que es capaz de escuchar la propuesta de abrir una escuela de teología en Marruecos y valorarla antes de desecharla, y desecharla con ese regustillo que queda ante algo que hoy no se puede hacer pero que estaría a nuestra altura afrontarlo.
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